Por: Eduardo Lastra D. (*)
La mágica ilusión de "cruzar" la frontera del tiempo, nos renueva las esperanzas de que lo malo quedará atrás y que nos encaminamos hacia nuevos momentos, donde podremos corregir errores y aprovechar otras oportunidades, que nos permitan labrar esa felicidad personal, familiar y empresarial que tanto anhelamos.
Al cambiar el año, es muy importante hacer un balance de nuestros actos y logros, para sacar lecciones que nos permitan ir superándonos.
También necesitamos, saber muy claramente cuáles son los sueños que queremos hacer realidad, para no perderlos de vista en ningún instante; pero, más valioso todavía, para trabajar sin desmayo, porque sin trabajo ordenado no tendremos resultados positivos.
Todo lo que hemos podido conseguir hasta ahora nos ha costado muchos sacrificios, muchas privaciones. Sin embargo, nos sentimos satisfechos, porque lo poco o mucho que tenemos es fruto de cada minuto entregado con responsabilidad.
Los que actuamos como empresarios de la micro y pequeña empresa, hemos tenido que luchar mucho para llegar a este momento. Pero, los días de angustia y de dudas se disiparán, si es que el próximo año superamos nuestros errores, para estar en mejor posición para el cumplimiento de nuestras responsabilidades empresariales.
Para esto, tendremos que trabajar con más técnica y con nuevas estrategias, para ofrecer la mejor atención personalizada a todos los que compran nuestros productos, y así lograr una clientela verdaderamente fiel.
Soy consciente que este deseo es fácil de decirlo, pero bastante complicado y laborioso llevarlo a la práctica, porque requiere de todos y cada uno de los integrantes de nuestro negocio el compromiso sincero de ser competitivos.
En ese sentido, pidamos a Dios que nos ayude a ser empresarios al servicio de nuestros clientes, del mercado y del país. Para eso, la tarea es capacitarse, organizarse y trabajar armoniosamente, para que nuestros clientes no nos abandonen y así nuestros respectivos negocios prosperen merecidamente.
(*) Presidente del Instituto Latinoamericano de Desarrollo Empresarial. ILADE
El Lic. Eduardo A. Lastra Domínguez, es peruano. En 1980 fundó el Instituto Latinoamericano de Desarrollo Empresarial, ILADE, con el fin de producir ideas para la gestión competitiva de las empresas, en este campo desarrolla Talleres Gerenciales para las medianas y grandes empresas. Dirigió la revista "Avance Economico". Desde 1996 impulsa la necesidad de una estrategia público-privada para la promoción de la micro y pequeña empresa; a los empresarios de las MyPE les brinda consultas y capacitación. Dirige el periódico Mundo MyPE. Ha publicado varios libros y videos de sensibilización por una cultura de emprendimiento competitivo y ético.